Recuerdo que cuando era pequeña me emocionaba al ver en la televisión el nacimiento de alguna criatura. Me resultaba maravilloso ver el milagro de la vida. Cuando tuve a mi primer hijo experimenté esa alegría de sentirlo crecer dentro de mí y comprendí que mi vida habia cambiado para siempre. Aprendí, entre tantas otras cosas, a ser paciente conmigo misma y con los ritmos propios de la naturaleza.
Cuando estamos embarazadas, la mayoría de nosotras querríamos tener ya a nuestro hijo en brazos. Pero es importante y necesario aprender a disfrutar cada etapa que se va presentando. Aunque no puedas abrazar a tu pequeño, existen diversas formas de mimarlo desde la panza. A veces las personas asociamos mimar o consentir a alguien con darle cosas materiales Pero lo más importante es que nuestro futuro hijo reciba de nosotras algunos regalos indispensables para que sea feliz, para que tenga todo lo que necesita y que van más allá de lo material. Por ejemplo:
Cuidarnos: Ya sea tener una buen la alimentación, hacer ejercicio, cultivar una mente positiva y vivir el embarazo con alegría, son aspectos que tienen que ver con nuestro cuidado, con querernos a nosotras mismas y transitar el embarazo de la mejor manera posible. Eso atraerá la armonía y será un regalo para tu futuro hijo, ya que nuestra salud tendrá repercusión en su desarrollo.
Descansar: Es primordial para tener un embarazo saludable. A veces cuesta, sobre todo en los últimos meses. Pero recuerda que luego de que nazca tu hijo no tendrás tanto descanso así que aprovecha para dormir siestas, relajarte, leer un buen libro. Una mamá feliz se traduce en un hijo feliz.
Hablarle: Desde que te enteras que estás esperando un hijo puedes empezar a hablarle. Cuéntale de ti, de su padre, de su familia. Puedes relatarle un cuento o lo que se te ocurra. Sentirá la ternura de tu voz y eso será importante para cuando nazca, ya que de bebé recordará lo que vivió en el vientre materno y eso lo ayudará a calmarse más rápidamente cuando esté llorando o nervioso.
Escuchar música: Pon música que te relaje. Puede ser música clásica, por ejemplo, o sonidos de la naturaleza. Te sientas o acuestas en un lugar tranquilo y colocas la música cerca de la panza. La música tiene efectos muy beneficiosos para el desarrollo del feto, además de relajarlos a ambos.
Establecer un contacto: coloca tus manos en la panza e imagina que le das a tu hijo todo tu amor y ternura. El bebe puede diferenciar y percibir tus caricias. Invita a tu pareja y al resto de la familia a contactarse con el pequeño.
Asegúrate que tu hijo tendrá todo lo que necesita: lo principal es el amor. Ese es el alimento fundamental para tu bebé. Pero también es bueno preparar el hogar que tenga las comodidades, higiene y cuidados necesarios para evitar peligros.
Por otra parte, no creas que llenar a tu hijo de objetos costosos o de moda le dará la felicidad. Un hogar lleno de amor es muy importante y necesario. Como así también que te prepares para darle el pecho. La leche materna es el alimento físico indispensable para tu hijo. Crea lazos, le da inmunidad y fortalece su organismo. Pero si llegado el caso no puedes amamantar por algún motivo, ten seguro que recibirá tu amor y cuidados de todos modos.
Ojala vivas un embarazo maravilloso. Y tú, ¿qué regalos le hiciste a tu futuro hijo?
¡Que tengas un gran fin de semana!¡Hasta la próxima!
Maria dice
Grasias por sus consejos tan útiles para el desarrollo de los niños