Hola amigas XXI! Espero que hayan pasado unas hermosas fiestas de navidad y fin de año. Hoy quiero compartir un tema que es de gran importancia cuando estamos embarazadas y es el de la alimentación.
Siempre me maravilló esa capacidad de la naturaleza de gestar la vida dentro del vientre de la mujer. Cuando estaba embarazada miraba videos por you tube de las diferentes etapas por las que transita el feto y me asombraba realmente cómo va creciendo y evolucionando. Ni hablar de lo hermoso que es sentir a tu hijo crecer y moverse a medida que transcurren los meses. Para que ese crecimiento sea el adecuado y tener un embarazo saludable es muy importante que tomemos conciencia que todo lo que ingiramos o bebamos va a tener influencia en nuestro hijo y su desarrollo.
Comencemos con lo que es conveniente evitar, no sólo por la salud del bebé sino para no aumentar tanto de peso:
- Harinas refinadas. Intenta reemplazarlas por harinas integrales. Los hidratos de carbono refinados se convierten en grasa y contribuyen al aumento innecesario de peso.
- Infusiones con cafeína.
- Alimentos ricos en grasa, como los productos de pastelería.
- Bebidas alcohólicas. En el embarazo es fundamental decirle que no al alcohol ya que cuando la madre ingiere alcohol, el mismo pasa de la sangre de ella al feto a través de la placenta.
- Pescados de gran tamaño como el pez espada. Los mismos poseen gran cantidad de mercurio y es potencialmente peligroso. Puedes consumir atún una o dos veces por semana sin problemas.
- Alimentos preparados con huevo crudo. Pueden ocasionar salmonelosis y toxoplasmosis.
- Vegetales mal lavados. Pueden transmitirte toxoplasmosis o listeriosis.
Qué conviene consumir:
- Gran variedad de frutas y hortalizas. Son la principal fuente de vitaminas necesaria para el desarrollo del feto.
- Carnes magras. Aportan las proteínas que tu cuerpo y el de tu hijo necesitan.
- Productos lácteos. Se recomienda consumir leche con alto contenido en hierro, calcio y vitamina D. Recuerda que el calcio es fundamental para el desarrollo óseo de tu hijo.
- Alimentos ricos en fibra. El pan, el arroz y las galletas integrales aportan la fibra necesaria, además de las frutas y verduras, lógicamente. Son ideales para prevenir o suprimir problemas de estreñimiento.
- Beber abundante agua: En el embarazo, no solo para tener una buena salud en general es necesario beber mucha agua, sino para asegurar que haya una cantidad óptima de líquido amniótico.
No se trata de prohibir alimentos. Quizás pienses:¿y si tengo antojos? Lo importante es consumir las comidas que engordan con moderación si es que te quieres dar algún gustito. Consulta con tu médico para que él te indique si debes tomar vitaminas o algún complemento como el hierro. Eso lo evalúan los especialistas. Jamás debemos automedicarnos.
¡Que tengas un bello embarazo!
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