Ser padres es una de las cosas más maravillosas que nos pueden suceder. Es una tarea llena de emociones encontradas, imprevistos, sorpresas, grandes responsabilidades y una felicidad inmensa. Nos cambia la vida totalmente.
Si bien es cierto que no hay certezas de cómo nos irá, ya que no tenemos una bola mágica, existen muchos cuidados que podemos tener desde el mismo momento en que decidimos agrandar la familia.
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En primer lugar, cuando ya estamos resueltos a hacerlo, debemos saber que existe una preparación fundamental para prevenir problemas y asegurarnos de estar en condiciones óptimas para tener un hijo.
¿Qué hacer?
1. Consultar con el médico.: Es importantísimo, ya que tu ginecólogo u obstetra:
-Te ayudará a prevenir infecciones (HIV; hepatitis, rubéola, tétanos, sífilis y chagas).
-Controlará si hay enfermedades crónicas: hipertensión, diabetes, anemia.
-Puede aconsejarte posponer el embarazo mientras se resuelven algunas complicaciones encontradas.
-Cuando ya esté decidido el embarazo, te prescribirá ácido fólico y te ayudará a elegir el momento oportuno para la concepción.
2. Alimentarse bien: Si estás llevando una alimentación desordenada, es hora de cambiar de hábitos y comenzar a hacerle caso a la pirámide nutricional. Si es necesario, pide ayuda a tu médico. En el embarazo y en la lactancia es fundamental que la mamá tenga una excelente alimentación, ya que de ella dependerá que el bebé sea sano y fuerte.
3. Hacer actividad física: Si eres alguien sedentario, es hora de ponerse en movimiento. Consulta a tu médico las actividades físicas que se pueden hacer en el embarazo. Así evitarás, por un lado, engordar demasiado y, por otro, algunos problemas de salud como la diabetes gestacional.
4. Reflexionar:¿Por qué quiero tener un hijo? ¿Es para completarme? ¿Es para llenar un vacío en mi vida?. Etc. Esta pregunta es importante que nos la hagamos. Un hijo es cosa seria y no es una decisión para ser tomada a la ligera. Debemos comprender que debemos estar dispuestos a dedicarles mucho tiempo de nuestra vida que, si bien acorde va pasando el tiempo se van haciendo cada día mas independientes, será durante muchos años. Por otra parte, es primordial tener el equilibrio emocional necesario para actuar correctamente ante las dificultades que se presenten y ser el apoyo que nuestros hijos necesiten en cada etapa de su vida.
5. Dialogar con la pareja: Hay algunos temas que son muy importantes y que no deben ser pasados por alto, como por ejemplo:
-¿Qué tipo de educación le quiero dar? Quizás haya diferencias en este punto con tu pareja, es por eso que es primordial conversar mucho al respecto. Si bien hay cosas que no se pueden prever, hay muchas otras que, mediante el diálogo, se pueden acordar de antemano. Si así lo hacemos, cuando llegue el momento, no habrá sorpresas que puedan hacer tambalear nuestro matrimonio.
-¿Cómo nos organizaremos económicamente cuando el bebé llegué? Este es un punto esencial. ¿La mujer dejará de trabajar los primeros años o es necesario que continúe, ya sea por razones económicas o profesionales? Es fundamental ser sincera con tu marido en relación a tus aspiraciones y anhelos para evitar malos entendidos.
Por último, si ya estás decidida o ya estás embarcada en este maravilloso viaje de la maternidad, ¡te deseo la mejor de las suertes, que puedas ser la mejor madre del mundo y disfrutar en familia la nueva vida que te espera!
Maria Beas De Bonilla dice
Bastante interesante y ya lo he compartido.
Reyes Perez dice
Interesante
Reyes Perez dice
Si bastante !!!