¡Hola amiga XXI! Hoy hablaremos un tema que seguro te va a interesar. Las personas que tenemos sobrepeso soñamos con poder ser delgadas, ya que mantener un peso saludable es beneficioso en muchos aspectos. Pero te sorprenderías al enterarte que, si haces dieta demasiado tiempo, esto puede conducirte a aumentar de peso. Si le preguntas a cualquier persona con kilos de más, en muchísimos casos te contará que ha hecho dieta toda su vida sin lograr resultados. Es más, probablemente haya subido de peso en el transcurrir de los años.
Recuerdo el caso de una amiga de la infancia. Ella tenía algunos kilos de más. Vivía haciendo regímenes para adelgazar. Con el tiempo, luego de hacer dietas estrictas, abandonando y volviendo a empezar mil veces, terminó engordando hasta 15 kilos. Había algo en su método que estaba fallando. Por eso es necesario ahondar en este tema tan preocupante para todos. No sólo si eres tú la del problema. Quizás sea tu esposo, tu madre o tus hijos los que tengan que mejorar su vida en ese aspecto.
Y aunque tus hijos sean delgados, todos sabemos cómo operan los medios de comunicación para hacer sentir, sobre todo a las niñas, que tienen que hacer dieta aún cuando su peso está dentro de lo normal. Para evitar grandes problemas alimenticios, la toma de conciencia hacia lo que ingerimos juega un papel muy importante.
Hace poco tiempo me topé con una interesante charla de TED. La oradora, Sandra Aamodt, neurocientífica y escritora, nos explica cómo hacer dieta toda la vida no da resultado. Cuando terminé de ver el video no podía salir de mi asombro y me hizo replantearme las estructuras mentales que tenía con respecto a este tema.
Hoy quiero compartir el video con las amigas de Mamá XXI, porque sé que a todas nos será de mucha utilidad.
En el mismo, la oradora cuenta su historia personal y hace hincapié en la importancia de cambiar nuestra manera de comer, escuchando a nuestro organismo. Lograr ese objetivo es posible, pero requiere que pongamos nuestra atención en nosotras mismas.
En primer lugar conectándonos con nuestro cuerpo. Vivimos en este mundo tan acelerado que sólo nos detenemos a escuchar al organismo cuando ya estamos enfermas. Cuántas veces nos sucede que queremos ir al baño y no lo hacemos porque estamos con los niños muy ocupadas, cuántas veces tenemos sed y no tomamos un vaso de agua, cuántas veces nos acostamos tarde aún teniendo mucho sueño. En esos ejemplos que te cito no estamos escuchando nuestras necesidades básicas. Y la hora de comer no es una excepción. En muchas ocasiones comemos de más porque consumimos los alimentos de una manera ansiosa o distraída. Al final, no registramos lo que comimos y tampoco nos damos cuenta de cuál es el tope de saciedad de nuestro cuerpo.
Volviendo al interesantísimo video, allí la disertante cuenta que tomó la decisión de dejar de hacer dieta y ser más cuidadosa con lo que comía. Como científica solía preguntarse porqué es tan difícil hacer dieta. Y luego de estudiar un poco, llegó a la conclusión de que el cerebro tiene una noción propia de lo que debemos pesar, no importa lo que pensemos nosotros. El sistema actúa como termostato para mantener el peso estable. Nuestro cerebro actúa así respondiendo a la pérdida de peso, empujando al cuerpo al peso que él considera normal. Si perdemos mucho peso de golpe, el cerebro interpretará que estamos sufriendo hambruna. Por eso, él siempre intentará que recuperemos peso, sobretodo si hemos permanecido mucho tiempo con sobrepeso. (Esto explica el porqué es más fácil, en general, engordar que adelgazar).
Pero existen soluciones, ella propone que seamos comedores intuitivos. Esto, ¿qué significa?: Que es importante tomar conciencia, comer con la atención puesta en lo que ingerimos, entender las señales del cuerpo, comer cuando tenemos hambre y parar cuando estamos satisfechos. Otro punto importante es comer sin distracciones y darse permiso de comer la cantidad de comida que uno quiera. Luego ver cómo se siente su cuerpo. La idea es tomar conciencia de cuándo parar de comer.
A la neurocientífica éste ejercicio le tomó un año pero dice que valió la pena. Los seres humanos no poseemos energía ilimitada, por eso, Aamodt aconseja que es mejor utilizar la fuerza de voluntad que usamos en hacer dieta en hacer otras cosas. Ella finaliza su video exhortando a los padres que enseñemos a los niños a entender el hambre, no a temerle.
Para finalizar, siempre que quieras cuidar tu alimentación y la de tu familia, lo mejor es consultar con un médico, así él elaborará un programa adecuado para cada edad. Las dietas súper rápidas pueden llevarte a engordar de nuevo, tal como lo explican en el video.
No dejes de ver la charla, dura sólo veinte minutos. Allí están muy bien explicados los procesos cerebrales y es interesantísima.
¿Te atreves a intentar comer con consciencia? Luego nos cuentas tu experiencia. ¡Hasta la próxima!
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